Los rojiblancos solo han sumado 9 de 24 puntos como visitantes y vuelven a comprometer su aspiración liguera
El Atlético de Madrid vuelve a mostrar su gran asignatura pendiente lejos del Metropolitano. Los números como visitante retratan a un equipo muy distinto al que se impone en casa: solo 9 de 24 puntos posibles, lo que equivale a un 37,5% de efectividad, una cifra insuficiente para competir de verdad por LaLiga.
El contraste con su rendimiento como local es tan evidente como preocupante. En el Riyadh Air Metropolitano, el equipo de Diego Simeone ha firmado 22 de 24 puntos, con un 91,6% de éxito, convirtiendo su estadio en un fortín casi inexpugnable. Sin embargo, fuera de él, el Atlético se diluye, pierde contundencia y deja escapar puntos clave jornada tras jornada.
Derrotas que evidencian el problema
La debilidad rojiblanca como visitante ha quedado expuesta especialmente en los partidos de mayor exigencia. Barcelona (3-1) y Athletic Club (1-0) han sido las últimas pruebas de ello, dos derrotas consecutivas que han abierto una brecha significativa en la clasificación y han alejado al Atlético de la pelea directa por el liderato.
Más allá de esos encuentros, el balance fuera de casa deja un reguero de oportunidades perdidas. Derrota en la primera jornada ante el Espanyol (2-1), empates frente a Alavés, Mallorca y Celta (todos 1-1) y solo dos victorias: la convincente del Benito Villamarín ante el Betis (0-2) y la mucho más sufrida en Getafe (0-1), decidida por un gol en propia puerta.
Poca pegada lejos de casa
Uno de los datos que mejor explica esta mala dinámica está en la producción ofensiva. El Atlético solo ha marcado ocho goles como visitante, a una media de uno por partido, muy lejos de los números que presenta en su estadio. La diferencia ofensiva es notable: doce goles menos fuera de casa respecto a su rendimiento como local.
Además, el equipo ha encajado nueve tantos lejos del Metropolitano, una cifra que, sin ser alarmante por sí sola, agrava la sensación de fragilidad cuando el Atlético no consigue adelantarse ni imponer su ritmo.
Las estrellas, apagadas a domicilio
El problema no se limita a lo colectivo. También afecta directamente a sus principales referencias ofensivas. Julián Álvarez, Alexander Sorloth y Antoine Griezmann no están marcando fuera de casa.
Julián Álvarez ha anotado nueve de sus diez goles esta temporada como local. El único tanto a domicilio llegó en la primera jornada, ante el Espanyol, de falta directa. Desde entonces, acumula ocho partidos seguidos fuera sin marcar. Sorloth, con cuatro goles este curso, no ha visto puerta lejos del Metropolitano, y Griezmann tampoco ha celebrado ninguno de sus cinco goles como visitante.
Los goles fuera de casa han llegado desde la segunda línea o acciones puntuales: Marcos Llorente, Giuliano Simeone, Álex Baena, Conor Gallagher y dos tantos en propia puerta han maquillado una producción ofensiva claramente insuficiente.
Un patrón que se repite
Esta fragilidad como visitante no es nueva. En los últimos 27 partidos ligueros lejos de casa, sumando el tramo final de la pasada temporada y el inicio de la actual, el Atlético ha conseguido 39 de 81 puntos, menos de la mitad. Un 48,1% que explica por qué al equipo le cuesta mantenerse en la lucha por el título hasta el final.
En las campañas en las que fue campeón (2013-14 y 2020-21), el Atlético fue sólido y agresivo fuera: más de un 66% de los puntos obtenidos como visitante. Hoy, esa cifra cae drásticamente y coloca al equipo en una situación comprometida.
Simeone reconoce el problema
Tras la derrota en San Mamés, Diego Simeone volvió a señalar la falta de contundencia como el principal déficit del equipo fuera de casa. El técnico insiste en que el Atlético compite, pero no decide: genera, resiste, pero no golpea cuando debe.
La explicación se repite, pero los números no cambian. Y mientras el Metropolitano sostiene al equipo, las salidas penalizan y abren distancia con rivales directos como Barcelona, Real Madrid o Villarreal, todos ellos más fiables a domicilio.
Once salidas para reaccionar
Con 22 jornadas aún por disputarse y once partidos como visitante por delante, el Atlético está obligado a corregir esta dinámica si quiere aspirar a algo más que asegurar puestos europeos. El margen existe, pero la tendencia preocupa.
Porque LaLiga no se gana solo en casa. Y mientras el Atlético no cambie su versión lejos del Metropolitano, seguirá caminando sobre el alambre, dependiendo de un fortín que, por sí solo, ya no basta.
Autor: Almudena Reoyo / Instagram: @denarojas_
