El pasado barcelonista de Roberto Fernández

Antes de ingresar en el Espanyol, vistió la elástica azulgrana durante la temporada 2022-23

La flamante incorporación invernal del conjunto perico jugó hace una temporada y media en el otro club de la ciudad. Más concretamente en su filial, donde casi consigue el ascenso a Segunda el mismo año que el Espanyol bajó a LaLiga Hypermotion.

Estancia en FC Barcelona

Con paso previo en el fútbol profesional, el 9 cayó de pie en el vestuario del segundo equipo culé. Esto es debido a que marcó y asistió en su debut contra L’Escala, en un partido amistoso. Asimismo, proporcionó una experiencia extra a una plantilla considerablemente inexperta. De hecho, fue la segunda más joven de la categoría solo por detrás del Madrid Castilla.

En cuanto al rendimiento individual, Roberto consiguió hacerse un hueco en los esquemas de Rafa Márquez, disputando un total de 36 partidos y anotando 7 dianas. La última de ellas es la que a día de hoy genera polémica, pues en el playoff de ascenso contra el filial blanco, el andaluz vio puerta. Entonces en su celebración agarró el escudo que portaba en el pecho, es decir, el del Futbol Club Barcelona. Sin embargo, hay quienes dicen que cuando se da cuenta de que no es el de ‘su’ Málaga, aparta la mano.

Su estancia en Can Barça llegó a su fin una vez eliminados de la promoción de ascenso, ya que el club catalán no abonó al Málaga la cláusula de compra por el joven. Esta rondaba los 5 millones de euros y la dirección deportiva prescindió de sus servicios. Máxime tras no ascender al fútbol profesional.

Actualidad en el RCD Espanyol

Entremedio, la temporada pasada Roberto Fernández fue clave en el ascenso del Málaga a Segunda y en la presente, el Sporting Braga lo fichó por 1,8 millones de euros. Sus actuaciones en Portugal estaban siendo discretas y ahora forma parte del Espanyol en calidad de cedido.

Con un par de goles anotados en casa en apenas 178 minutos, el de Puente Genil se ha puesto a la afición del RCDE Stadium en el bolsillo. No es para menos, puesto que está siendo clave en el resurgir de un equipo que lucha por eludir los puestos de descenso.

Pese a que la inversión por parte de la propiedad es mínima, Fran Garagarza y compañía pondrán todo de su parte en aras de ejercer la cláusula de compra opcional de 10 millones de euros. En efecto, en primera instancia parece costoso, pero en el balompié cotizan los goles y Roberto Fernández los lleva en la sangre.