Tras los incidentes en el derbi entre Atlético y Real Madrid, Antiviolencia propone sancionar al club rojiblanco con el cierre del Estadio Metropolitano por dos semanas y una multa de 65.000 euros
La Comisión Antiviolencia ha dado un golpe sobre la mesa . Tras los graves incidentes ocurridos en el Metropolitano durante el derbi entre el Atlético de Madrid y el Real Madrid, el organismo ha propuesto el cierre completo del Estadio durante dos semanas y una multa de 65.000 euros al club rojiblanco. Esta decisión llega después de que varios aficionados radicales lanzan objetos al guardameta del equipo rival, Thibaut Courtois , durante el encuentro del pasado 29 de septiembre, generando la interrupción del partido por varios minutos.
Lanzamiento de objetos y simbología nazi.
El partido, celebrado en el feudo del Atlético, tuvo que ser detenido por el árbitro Mateo Busquets Ferrer, cuando desde la grada se lanzaron mecheros y otros objetos hacia Courtois, en un acto que escandalizó al mundo del fútbol. Las imágenes del momento no solo mostraron objetos peligrosos volando hacia el campo, sino también un hallazgo impactante: una navaja de 22 centímetros fue confiscada en la zona donde se concentraron los incidentes.
A este lamentable suceso se suma la exhibición de simbología nazi en las gradas, un hecho que ha generado repercusión internacional y ha dañado la imagen de LaLiga . La Comisión de Antiviolencia, al proyectar imágenes de cadenas televisivas de todo el mundo, calificó lo sucedido como «muy grave» y expresó que la situación marcaba un punto de inflexión en la lucha contra la violencia en el deporte.
El Atlético responde: cuatro socios expulsados y más medidas en camino
Ante la gravedad de los hechos, el Atlético de Madrid ha reaccionado con celeridad . El club ha expulsado ya a cuatro socios identificados como responsables directos de los altercados, y se espera que esta cifra aumente a medida que avancen las investigaciones. La Policía sigue trabajando en la identificación de otros aficionados involucrados, mientras que el club colabora activamente con las autoridades para esclarecer lo ocurrido.
Sin embargo, el Atlético de Madrid ha mostrado su desacuerdo con la sanción propuesta por el Comité de Disciplina de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), que también impuso el cierre parcial del Fondo Sur durante tres partidos , además de la multa económica. En un comunicado, el club argumentó que “ el comportamiento inaceptable de unos pocos no puede suponer un castigo tan desmedido hacia una gran mayoría que no cometió ninguna falta”.
Reincidencia y sanciones previas: el Atlético en el punto de mira
Este no es el primer caso de violencia en el Metropolitano. En abril de 2023, el Atlético fue sancionado con 20.000 euros y el cierre parcial del Fondo Sur tras insultos racistas contra Nico Williams , aunque el club logró reducir la sanción tras recurrirla. A esto se suma una multa de 30.000 euros de la UEFA por saludos nazis de sus ultras en el partido de Champions ante el Benfica, y la prohibición de venta de entradas para su próximo desplazamiento europeo, condicionada a que no se repitan incidentes similares.
Un futuro incierto para el Metropolitano
El Atlético de Madrid se enfrenta a un panorama complicado con sanciones económicas y la posible clausura de su estadio por dos semanas, lo que afectaría tanto al equipo como a los aficionados. La última decisión recae en la Secretaría de Estado de Seguridad, mientras el club confía en poder recurrir las medidas. Sin embargo, Antiviolencia mantiene que estas sanciones buscan garantizar la seguridad en el fútbol y evitar conductas futuras.
Reflexión final: ¿Hacia dónde va el fútbol?
Estos incidentes vuelven a poner sobre la mesa la necesidad de tomar medidas contundentes contra la violencia en el deporte. La Comisión de Antiviolencia ha dejado claro que no se tolerará más la impunidad de estos actos y que es responsabilidad de todos —clubes, aficionados y organismos— trabajar para erradicar cualquier conducta que atente contra la convivencia en los estadios.
El fútbol debe ser una fiesta , no un escenario de violencia. Y las decisiones que se tomen en torno a este caso serán determinantes para el futuro del deporte en España .