Real Madrid 4 – 0 Girona I Vini es el líder

El conjunto blanco goleó a la revelación de LaLiga para dar un golpe sobre la mesa y dejar la competición prácticamente sentenciada

La vigésimo cuarta jornada de LaLiga ofrecía una final anticipada por el campeonato nacional entre el Real Madrid y el Girona. Madridistas y gerundenses han monopolizado, sin debate alguno, la competición y en el día de hoy el enfrentamiento entre ambos marcaría un antes y un después en el devenir de la temporada. 

Minuto de silencio Real Madrid – Girona I Imagen: OneFootball

El ambiente por Chamartín era especial, todo hacía prever un auténtico partidazo. La afición madridista era consciente de la trascendencia del encuentro y quiso hacerle saber a los muchachos de Ancelotti que no estarían solos; que, como siempre, en otra noche mágica la parroquia merengue alentaría a los suyos y les conduciría en volandas hacia una victoria que podría suponer el trigésimo sexto título liguero del Real Madrid. 

Exhibición de Vini Jr en la primera parte

El pitido inicial del colegiado dio comienzo al espectáculo futbolístico y, rápidamente, pudimos tomar consciencia del planteamiento de ambos equipos. El Girona hizo gala de su característica personalidad y quiso salir jugando desde atrás, tratando de dominar el encuentro. Por su parte, el planteamiento de Ancelotti consistía en un repliegue en tres cuartos de los merengues, dejando tocar a sus rivales en zonas sin gran incidencia, e intentando castigar a la contra con sus armas ofensivas. 

El primer gol del partido no se hizo esperar y fue una auténtica obra de arte de Vini Jr. El brasileño se inventó un golazo desde fuera del área con un remate inapelable que desató la locura en el Santiago Bernabéu. Valverde abrió a la banda izquierda para Vini y, a partir de ahí, el ‘7’ blanco tan solo recortó, dejó que Bellingham se desmarcara para encontrar ángulo de tiro y la rompió para hacerle saber al mundo entero que está de vuelta; que él es el verdadero líder de este Real Madrid, el héroe del hat-trick en la final de la Supercopa de España ante el Barça, el de la exhibición ante el Valencia en honor a todos los racistas…, en definitiva, que, a pesar de la irrupción imparable de Bellingham y la ilusión de la posible llegada de Mbappé, el niño maravilla del Real Madrid sigue y seguirá siendo él. 

Vini Jr vs Girona I Imagen: OneFootball

A partir del gol de Vini, los de Ancelotti dominaron el encuentro a su antojo hasta tal punto que, sobre el minuto 35, Vinicius volvió a sacarse una genialidad de la chistera y asistió con el exterior, emulando al mejor Luka Modric, a Jude Bellingham. El inglés se reencontró con el gol regateando al guardameta del Girona y anotando el segundo en el luminoso para recibir con los brazos abiertos a una liga que ya parece camino de Cibeles. 

La lesión de Bellingham, la peor noticia de un partido perfecto

Los segundos 45 minutos comenzaron prolongando la tónica predominante en el primer acto. Vini Jr continuó a lo suyo, ofreciendo un recital futbolístico en el que sin duda fue uno de sus mejores partidos con la elástica del Real Madrid. El brasileño logró convertir a Yan Couto, mejor lateral derecho de LaLiga, en un jugador absolutamente impotente ante la exhibición del ‘7’ blanco.

Así pues, en una de sus primeras ocasiones de la primera parte, Vini bailó a su par y a unos cuantos defensores gerundenses para terminar golpeando como pudo y, tras la parada de Gazzaniga, provocar el segundo tanto de Jude Bellingham. El centrocampista de Birmingham protagonizó la peor noticia de un encuentro prácticamente perfecto del Real Madrid y es que tuvo que marcharse lesionado de su tobillo izquierdo.

Rodrygo y Vini vs Girona I Imagen: OneFootball

Asimismo, Rodrygo Goes también quiso sumarse al festín goleador de Vini y Bellingham y anotó el cuarto tanto de los locales después de que Vini Jr, en absoluto estado de gracia, robase un balón en medio campo. El ’11’ Del Real Madrid se lo guisó y se lo comió recorriéndose todo el campo rival y batiendo al guardameta visitante con un fantástico tiro desde la frontal del área. Finalmente, el paso de los minutos y los cambios introducidos por sendos entrenadores enfriaron el choque, redujeron su intensidad y condujeron el partido hasta su final. Los tres pitidos del colegiado concluyeron el duelo a favor de los blancos y supusieron un golpe prácticamente definitivo en la lucha por LaLiga.

Autor

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Search this website