Real Madrid y Liverpool se vieron las caras en Anfield en el que fue el partido de la jornada de la Champions League con dos equipos históricos del continente europeo sobre el terreno de juego
Primera Parte
Real Madrid de Liverpool, se veían las caras en el que era el partidazo de la jornada. Eran uno de los estadios magnéticos de Europa. El partido arrancó con el Liverpool controlando el primer tramo del los primeros 45 minutos. dominando la mayor parte de la posición como de esperar al jugar del local.
Tal fue el dominio, que en el primer tramo de la primera parte, el canterano del Real Madrid Raúl Asencio salvó el primer match ball bajo la línea de la portería de Courtois. Los de Ancelotti contaron con un par de ataques, pero que no acabaron en ocasión de peligro. Ya en torno al minuto 30 de partido, el ritmo de partido bajó, con un Liverpool buscando adelantarse en el marcador.
El partido se aceleraba y las revoluciones no hacían más que subir. Tal fue la presión del Estado inglés que en el minuto 32 de partido Darwin Núñez estuvo a nada de colocar a los reds por delante tras un cabezazo que rozando el palo de Courtois. El encargado de cabecear sevundos después fue Salah en el interior del área pequeña del Real Madrid y que tipo Courtois acabó despejando con los puños.
La recta final de la primera parte siguió la misma tónica que todos los primeros 45 minutos un cuento del momentáneo del Liverpool, quien parecía tener más papeletas para ponerse por delante. En el marcador el colegiado señaló el pitido final de la primera parte, ambos equipos encargaron los vestuarios con un empate en el marcador.
Segunda Parte
La segunda parte, parece que no cambiaba, y es que en apenas cinco minutos de los segundos 45 minutos, el Liverpool ya sacó hasta tres cortes consecutivos. Por parte del Real Madrid, muchas dudas y poco juego ante un Liverpool que claramente dominaba el encuentro. La tónica de la segunda parte no cambiaba con respecto a los primeros 45 minutos, y es que el Liverpool mantenía el esférico y era quien más papeletas ganaba para colocarse por delante en el electrónico. Finalmente, el conjunto local obtendría su recompensa en el minuto 52 cuando Alexander McAllister ponía a los Red Devils por delante en el electrónico.
Las malas noticias continuaban para el Real Madrid y es que en el minuto 57 Eduardo Camavinga se retiró lesionado de terreno de juego y en su lugar entró Ceballos. Pocos minutos después, tras una gran jugada colectiva por parte del Real Madrid, el colegiado señaló el punto de penalti tras un jugador del Real Madrid en el interior del área del Liverpool. El encargado del penalti fue Kylian Mbappé, quien no consiguió batir guardametas del Liverpool haciendo retumbar Anfield. De esta manera se confirmaba el mal partido del Real Madrid quien hasta ahora se había visto totalmente superado por parte del Liverpool.
El partido enloquecía y en el minuto 69, el colegiado señalaba de nuevo los 11 metros, pero esta vez a favor del Liverpool. Mohamed Salah fue el encargado de tirar el penalti, el cual no entró ni entre los tres palos de la portería madridista enviándol el balón fuera. Una auténtica locura de partido con un Liverpool arrollador y dos penaltis fallados, uno por parte del Real Madrid y otro por parte del Liverpool. Para rematar el auténtico partidazo del Liverpool y el mal partido del Real Madrid, en el minuto 75, los Red Devils ponía el dos marcador tras un cabezazo en el interior del área pequeña de Courtois.
De esta manera, el Liverpool sentenciaba el partido llevándose una más que merecida a Victoria y dejando al Real Madrid muy tocado con un carro Ancelotti, que podría estar viviendo su última semana como entrenador del Real Madrid. Finalmente, el colegiado señaló el pitido final con un Liverpool que se lleva la victoria tras ocho partidos enfrentándose al Real Madrid, equipo que regresará a la capital española muy tocado y con muchas más dudas de las que ya tenía.