El Atlético de Madrid vivió anoche una de esas grandes noches que dejan buen sabor de boca al aficionado. El club rojiblanco pasó por encima de un Rayo Vallecano muy flojo, y le endosó un 0-7 que no se va a olvidar.
El Atleti presumió de acierto, pero también de juego, porque cuando los de Simeone quieren jugar, pocos equipos son capaces de pararles. Una de las noticias positivas del duelo de ayer, fue el centro del campo rojiblanco, formado por Saúl, Barrios y De Paul. Pero, ante la ausencia del necesitado “5”, la actuación de Barrios hay que señalarla.
Barrios hizo de Koke ante el Rayo
Simeone pareció rendirse con la llegada de ese “5” que el Atlético de Madrid sigue necesitando cuando dijo en rueda de prensa que, con Koke, Witsel y Barrios, esa posición estaba cubierta. Sin Koke disponible por unas semanas, Simeone debía decidir si subía a Witsel a su posición, o si ponía al canterano rojiblanco haciendo del capitán. La elección en Vallecas fue la segunda.
El Cholo admitió en rueda de prensa que había hablado con el madrileño, y le había señalado que le veía más como centrocampista, a lo que el jugador rojiblanco no se opuso, pues es una posición que ya conoce, y en la que se siente cómodo. Y ayer demostró que no mentía.
El partido de Barrios en Vallecas fue de notable alto, aunque hay aspectos que pulir. El canterano ya cambió las cosas cuando saltó al verde en el Villamarín, pero ayer se coronó con una actuación notable.
Barrios mandó en el centro del campo rojiblanco, y se encargó de hacer ese “trabajo sucio” que hace siempre Koke. O más que sucio, ese trabajo silencioso que pocos valoran. Recorrió 10 kilómetros en los más de 90 minutos que jugó contando añadido, completó los 4 regates que intentó, ganó 10 de 17 duelos en el suelo, ganó el único duelo aéreo que se le planteó, completó 4 despejes, realizó 4 intercepciones y realizó 4 entradas.
Grandes datos para un chico que afrontaba su primera titularidad en Liga esta temporada, y haciendo un trabajo muy difícil: el de sustituir a Koke. Por poner un “pero” a su encuentro, las pérdidas son un detalle a mejorar por parte del centrocampista. Perdió 15 posesiones, y falló 9 pases (aunque mirándolo de ese modo, tuvo un 74% de acierto, acertando 26 de 35).
Un dato que, conociendo al canterano rojiblanco, mejorará en los próximos partidos, porque a Koke todavía le queda alguna jornada fuera. Pero a pesar de ese pequeño “pero”, el partido de Barrios fue de notable, siendo uno de los mejores del equipo rojiblanco.
