Gian Piero Gasperini, entrenador de la Atalanta, compareció ante los medios en la rueda de prensa previa a la final de la Europa League ante el Bayer Leverkusen, un duelo que se disputará en el Estadio Aviva de Dublín.
El conjunto italiano se enfrentará a uno de los equipos más en forma de la temporada, quienes acumulan 51 partidos sin conocer la derrota y están a dos finales de conseguir un triplete histórico. A pesar de ello, el técnico italiano confía en su equipo. “En nuestro camino, también nos hemos enfrentado a equipos muy fuertes”. “Tendremos que tener un gran rendimiento”.
A pesar de ello, Gasperini declaró que el Bayer Leverkusen es un equipo que domina muchas facetas y que puede hacer daño en muchas áreas del terreno de juego. «Es un equipo que se rearma muy bien y se adapta a todo tipo de situaciones, merecen todos los resultados que han conseguido». El italiano transmitió el respeto que le tiene tanto a Xabi Alonso como a su equipo. Están convencidos de que sufrirán ocasiones en contra, pero también tendrán la oportunidad de generar mucho peligro.
La clave, la afición
Tras certificar su billete a la UEFA Champions League de cara a la siguiente temporada, la Atalanta buscará representar a Italia en Europa de la mejor manera posible, ganando la Europa League. Para ello, la afición juega un papel fundamental. «Hay mucha gente que nos animará, sentimos su apoyo y eso nos motiva mucho de cara al partido». Gasperini tendrá que plantear el encuentro sin uno de sus mejores efectivos, Marten De Roon, el capitán de la Atalanta. «Nos hubiera gustado que estuviera sobre el terreno de juego, pero como no ha sido posible estará en el vestuario con nosotros, apoyando». «Estoy muy feliz de que esté aquí, es un capitán ejemplar».
Por último, Gasperini declaró que están acostumbrados a partidos tan exigentes como este. «Hemos jugado partidos importantes en esta temporada». Ambos equipos tienen los motivos suficientes para hacerse con ese ansiado trofeo, pero solo uno de ellos será capaz de tocar el cielo del Estadio Aviva, en la noche del 22 de mayo.