OPINIÓN: Thomas Müller, el aficionado que cumplió un sueño

El «one-club-men» bávaro es ya el jugador con más partidos en la historia del Bayern Múnich, con 710 encuentros disputados de manera oficial, superando a leyendas como Maier (709), Kahn (632), Gerd Müller (613) o Beckenbauer (584)

Muchos niños y niñas sueñan con ser futbolistas desde corta edad, pero la mayoría acaban fracasando en el intento, ya sea por la presión desde jóvenes, por la pérdida de interés, por volcarse en sus estudios, por no verse capaces de soportar la exigencia y la disciplina impuesta por los equipos formadores, quienes muchas veces se olvidan de dejarlos o dejarlas disfrutar… Sin embargo, los chicos y las chicas que sí acaban llegando a ser futbolistas profesionales suelen desear jugar en el equipo de su ciudad o en el más cercano a su lugar de vivienda, y ese es el caso de Thomas Müller (Weilheim am Oberbayern, Baviera, Alemania, 13 – 09 – 1989).

Aficionado del club más grande de Alemania desde niño, lleva jugando desde 2008 en el Olympiastadion Múnich (Allianz Arena) y mínimo continuará su aventura en la capital bávara hasta 2025, aunque tras su retirada de la selección alemana no se descarta que pueda ampliar el vínculo.

Thomas Müller, de niño, ataviado con la camiseta del Bayern Múnich
Müller, de niño, ataviado con la camiseta del Bayern Múnich. Foto: FC Bayern

Debido a su edad y a la aparición de Musiala, su rol es más residual, pero ha empezado la pretemporada en gran forma y marcó en su primer partido como local el pasado domingo ante el Friburgo, redondeando una jornada histórica para un futbolista que ya es toda una institución no sólo en Baviera, sino también en Alemania, pues es el futbolista más ganador de la historia de su país, superando a otras leyendas como Manuel Neuer y Toni Kroos.

Müller celebra su gol al Friburgo. Foto: FC Bayern

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