Ayer, el FC Barcelona recibió un contundente 4-1 del Real Madrid en la final de la Supercopa de España y estos son algunos de los motivos de esta debacle
El Barça no realza el vuelo. El arranque de esta temporada no está marchando según lo previsto y los pupilos de Xavi ya han perdido la condición de campeón en el primer título de la campaña de la peor manera: siendo goleados por el Real Madrid, el eterno rival.
Por lo que aquí vamos con tres de las claves que condujeron al FC Barcelona hacia el abismo en Riad.
La defensa avanzada: buen concepto, mala ejecución
Xavi puso en escena la defensa avanzada, una estrategia en la que el equipo adelantó su línea defensiva para inhabilitar a la delantera contraria. Un concepto, a priori, coherente en vista de la velocidad de Vinicius y Rodrygo al espacio.
Sin embargo, los zagueros del FC Barcelona cometieron errores al ejecutar la idea de Xavi y lo pagaron caro. Tanto que se vieron superados en gran parte del encuentro y perdieron completamente la concentración, hasta el punto de provocar errores individuales en todos y cada uno de los cuatro goles recibidos.
Primeramente la pérdida de la marca de Jules Koundé y, a posteriori, la titubeante salida de Iñaki Peña en el primer tanto de Vinicius. Y, más tarde, la desconexión de Araujo al lanzar la línea de fuera de juego. Un total de 2 goles en los 10 primeros minutos que dejaron prácticamente fuera de combate al Barça en la final.
Falta de actitud en los jugadores
En conjunto, el Barça careció de actitud sobre el terreno de juego. Saltaron al SuperClásico con desconexiones y despertaron de su letargo en el 33’ con un obús de Lewandowski. No obstante, con el tercer gol de Vinicius de penalti antes del descanso se borraron del choque.
De hecho, Xavi introdujo una triple modificación en su sistema, pero los azulgrana abdicaron en la presión y Rodrygo firmó la sentencia en el minuto 64. A excepción de Fermín López y Lamine Yamal. Los dos canteranos ingresaron en el segundo tiempo con una actitud acorde a la situación y con la ambición que le faltaba a sus compañeros.
Cambios adecuados, momento incorrecto
El técnico catalán acertó en las modificaciones que necesitaba su equipo, pero no en el timing de producirlas. Xavi, con un 3-1 en contra, regresó del túnel de vestuarios sin hacer ninguna sustitución en el once inicial.
No fue hasta el minuto 62 que el entrenador de Terrassa agitó su sistema con un triple cambio (Joao Félix, Fermín López y Lamine Yamal), aunque sin excesivo éxito. Puesto que justamente dos minutos después, en el 64’, Rodrygo culminó la goleada madridista con el 4-1 y Araujo se marchó expulsado por doble amarilla en el 72’.
Por lo que los tres hombres de refresco poco pudieron hacer ante la situación en la que ingresaron al césped.
