Dos goles anulados a Riquelme y una defensa férrea del Espanyol frenan al Atlético en un empate sin goles en el Metropolitano
En la tercera jornada de LaLiga 2024/2025, el Atlético de Madrid se enfrentó al Espanyol el 28 de agosto a las 9:30 de la noche en el estadio Civitas Metropolitano. El Atlético, cuarto en la tabla con una victoria y un empate, se medía ante un Espanyol que llegaba en la 18ª posición tras dos derrotas consecutivas. Históricamente, el Espanyol es el equipo al que más veces ha vencido el Atlético en LaLiga, con 83 victorias en 162 enfrentamientos, y es el único al que ha marcado más de 300 goles en la competición (307).
Primera parte: con balón pero sin gol
En la primera mitad del partido entre Atlético de Madrid y Espanyol, el equipo local tomó el control del juego desde el inicio. El Atlético mostró un dominio claro en cuanto a posesión de balón y generación de ocasiones. La banda derecha, con Nahuel Molina y Rodrigo de Paul, fue particularmente activa, creando varias llegadas al área rival. La ocasión más peligrosa del Atlético fue un disparo potente de Rodrigo de Paul desde fuera del área que obligó al portero del Espanyol, Joan García, a lucirse con una parada espectacular. Además, Riquelme también estuvo involucrado en varias jugadas peligrosas, aportando desequilibrio por la banda izquierda.
Por su parte, el Espanyol, aunque tuvo menos control del balón, no se quedó sin oportunidades. Su jugada más peligrosa llegó a través de un cabezazo de Véliz, que estuvo muy cerca de abrir el marcador tras un centro preciso desde la banda. El Atlético defendió bien en general, pero esta acción aislada del Espanyol puso en alerta a la defensa local.
A pesar de las numerosas oportunidades de ambos equipos, ninguno logró concretar y el primer tiempo finalizó con un empate 0-0, dejando todo abierto para la segunda mitad.
DESCANSO
Durante el descanso, ambos entrenadores aprovecharon para ajustar estrategias. Simeone buscó mayor precisión en la definición tras las ocasiones desperdiciadas, mientras que el Espanyol se concentró en mantener su solidez defensiva y mejorar su efectividad en el ataque. El partido seguía abierto y se esperaba que cualquier detalle pudiera decidir el resultado en la segunda mitad.
Segunda parte: el fuera de juego, protagonista
En la segunda mitad del partido entre el Atlético de Madrid y el Espanyol, el Atlético mantuvo la presión ofensiva, destacando Riquelme, quien tuvo dos goles anulados. El primero fue revisado por el VAR y anulado por fuera de juego. En el segundo, el asistente de línea levantó la bandera también por fuera de juego, frustrando nuevamente al equipo local. Griezmann estuvo activo en ataque, aunque sin suerte.
El Espanyol tuvo una oportunidad clara con Cheddira, pero Oblak respondió con una parada crucial. Además, se generó polémica cuando el Atlético reclamó un penalti que no fue sancionado por el árbitro. Las amonestaciones también fueron parte del encuentro, con varios jugadores recibiendo tarjetas por la alta intensidad del juego.
A pesar de los esfuerzos, el encuentro finalizó 0-0 y ambos equipos se repartieron un punto. El Atlético quedó con la sensación de haber merecido más, mientras que el Espanyol logró un valioso empate fuera de casa.