El conjunto azulón sale con tres puntos de su visita al Benito Villamarín y ve más cerca su salvación.
El banquillo del Getafe ha estallado de júbilo tras el pitido final del colegiado Ricardo de Burgos Bengoetxea, tras un encuentro en el que la efectividad de los chicos de Bordalás han terminado por otorgarle tres puntos de oro a su afición.
Después de una primera parte en la que el Getafe veía cómo le anulaban un gol a Jaime mata por falta previa sobre un jugador del Betis, y en la que ha tenido que retirarse lesionado Enes Ünal, el encuentro parecía torcerse a favor del Real Betis, que monopolizó la posesión en los primeros 45 minutos y que efectuó el único remate entre palos en toda la primera mitad del encuentro.
El equipo local salió con un poco más de convicción tras el descanso, haciendo uso de la explosividad de Ayoze Pérez, jugador que ha sabido adaptarse de maravilla a los intereses del conjunto dirigido por Manuel Pellegrini, o a la picardía de Juanmi; a pesar de ello, ninguno de los atacantes del Betis consiguió batir a David Soria, que terminó por frustrar los intentos de anotar del conjunto de las trece barras.
Pero los de Bordalás no han tirado la toalla, y ha sido en un saque de esquina botado por Luis Milla, donde el central paraguayo Omar Alderete ha sobrevolado la zaga defensiva del Betis y ha colocado un testarazo inapelable dentro de la portería que hoy defendía Claudio Bravo, que apenas tuvo tiempo para reaccionar.
A partir de ahí, el Getafe ha sabido realizar un ejercicio defensivo impecable, reteniendo cualquier tipo de arrancada por banda de los atacantes del Betis, que no ha conseguido dar con la tecla para darle la vuelta al partido. Además, el encuentro, que ya estaba siendo marcado por continuas faltas de uno y otro equipo, ha terminado por romperse tras la expulsión de Germán Pezzella por roja directa. Ha sido una patada sobre el rostro de Portu la que le ha costado la que es ya su cuarta cartulina roja en lo que va de temporada al zaguero del Betis y vigente campeón del mundo. Una tarjeta que prácticamente certifica que el conjunto hispalense terminará esta temporada siendo el equipo con mayor número de expulsados.
Este triunfo, podría haber sido más contundente para el Getafe si el resultado entre el Espanyol y el Atlético de Madrid, hubiera acabado con una diferencia de tres goles a cerco para el conjunto del Cholo Simeone, pero “los pericos” han terminado por remontar un partido que parecía que tenían completamente perdido, y han rescatado un punto que sigue manteniendo abierta la pelea por la salvación, a falta de dos jornadas para poner el broche final a una temporada que está acabando por todo lo alto.
En cuanto al Getafe, disputará su próximo encuentro en casa contra el Osasuna el próximo domingo 28 a las 19:00 (hora peninsular), mientras que el Betis viajará ha Barcelona para jugar, el mismo día y a la misma hora, contra el Girona. Todo aún puede suceder.
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