Racismo en una grada de Mestalla y trifulca entre jugadores

Ayer se disputó un Valencia – Real Madrid que quedará para el recuerdo por temas distintos al fútbol, pues se escucharon cánticos racistas, gritos de odio y hubo una trifulca entre jugadores de ambos conjuntos.

Los principales protagonistas del encuentro fueron Vinicius, una parte de la afición valencianista, Giorgi Mamardashvili y Hugo Duro. Primeramente, fuera del estadio de Mestalla, cuando los jugadores del Real Madrid bajaron del autobús se escucharon cánticos de “¡VINICIUS ERES UN MONO, VINICIUS ERES UN MONO…!” antes de comenzar el partido y mientras Vinicius se dirigía al interior del estadio, algo que no debería ocurrir en contra de ninguna persona, ajena o no al fútbol, y sea del club que sea.
Más tarde, durante el encuentro, cuando en una de las ocasiones el balón salió por la línea de fondo del área del Valencia, una aficionado que apoyaba a los locales (pero que seguro que no representa los valores del club, ni muchísimo menos) llamó “¡MONO!” a Vinicius. El jugador del Real Madrid identificó a aquella persona racista de la grada y la Policia Nacional actuó con rapidez y eficacia al llevársela de allí.

En la liga española de fútbol, desde hace décadas han existido múltiples casos de racismo y odio. La forma en la que la RFEF (o los propios clubes) actuaron en otros casos de racismo en el pasado por parte de algunas personas de las gradas hacia algún jugador, como ocurría años atrás con Neymar, con Carlos Kameni, con Samuel Eto’o, y hace no mucho también con los hermanos Williams, por poner algunos ejemplos, fue prohibiendo la entrada al campo a los autores de los hechos racistas o llevando acabo la retirada de sus abonos. Aún está por ver que sucederá finalmente con los sujetos que han podido ser identificados.

Mientras tanto Rüdiger, Militão, Kroos y Benzema defendieron y separaron de la grada al internacional brasileño mientras que también varios jugadores del Valencia mostraban los valores del club tratando de calmar a su afición, haciendo gestos de tranquilidad y dándoles a entender que eso no estaba bien. Después de esto, una parte de la afición de esa grada del Valencia saltaba al cántico de ‘TONTO, TONTO…’ hacia Vinicius. También se escucharon gritos de “¡PUTO NEGRO, HIJO DE PUTA!” y “¡PUTO MONO, QUE ERES UN PUTO MONO!” mientras se desempeñaba el juego. Vinicius fue a hablar con Ancelotti pero no quiso abandonar el terreno de juego.

LA TRIFULCA ENTRE JUGADORES DE AMBOS CONJUNTOS

Cuando llegamos al tiempo de descuento sucedió una trifulca entre ambos conjuntos, trifulca en la que en un principio Vinicius había visto la tarjeta amarilla por la imagen que le mostraron a De Burgos Bengoetxea desde el VAR. En dicha imagen del VAR pudimos ver como Vinicius apartaba de un manotazo en la cara al jugador del Valencia, Hugo Duro. Más tarde salieron otras imágenes (que en teoría el VAR no mostró al árbitro), y fueron aquellas en las que se pudo apreciar como antes del manotazo de Vinicius a Hugo Duro, el guardameta del Valencia, Giorgi Mamardashvili, salía corriendo hacia Vinicius y lo cogía por el cuello de la camiseta.

Al mismo tiempo que ocurría esto, otro jugador del Valencia, Hugo Duro, cogía del cuello a Vinicius con el brazo desde su espalda durante 10 segundos exactos, echándolo hacia atrás y por consiguiente ahogándole, y ahí entonces fue cuando Vinicius salió del embrollo y dio un manotazo en la cara al jugador del Valencia.

LA DECISIÓN DE DE BURGOS BENGOETXEA TRAS LA IMAGEN DEL VAR

Ricardo de Burgos Bengoetxea fue al VAR a revisar lo ocurrido y solo vio la imagen en la que Vinicius apartaba a Hugo Duro y tomó una decisión que fue discutida por muchos: le quitó la amarilla a Vinicius, le sacó roja directa, y a Mamardashvili y a Hugo Duro solo les sacó amarilla. Vinicius se marchó del terreno de juego haciendo gestos feos a la afición del Valencia, gestos con la mano con los que quería recordar a toda la afición valencianista que su club se iría a segunda división (pese a que el Valencia se mantendrá en primera división precisamente por los 3 puntos conseguidos ayer al ganar por 1-0 al Real Madrid).

Situaciones intolerables como las acontecidas hoy en Mestalla, con comportamientos de odio, con racismo, con violencia y con un VAR que no muestra al completo todo lo que debería mostrar al colegiado, son las que provocan el déficit del prestigio de de la competición española año tras año.