
Queríamos que el retorno de la sección de “Dirección Deportiva” fuera memorable. Por eso, y tras el artículo sobre el Manchester United, hablamos de otro grande inglés en crisis: el Chelsea FC. Desde la marcha del oligarca ruso-israelí, Roman Abramovich, el club ha ido sin rumbo fijo. Con una política de fichajes extrañísima y sin mucho sentido y varios cambios de entrenador sin parecer tener una idea clara del estilo al que quieren jugar. No es para menos que el nuevo dueño, Todd Boehly, haya gastado aproximadamente 300 millones de euros en el pasado mercado invernal. Solo los Blues han gastado unos 39 millones más que las otras cuatro grandes ligas europeas juntas. Es por eso que nos hemos propuesto el siguiente reto:
- Establecer un estilo de juego
- Generar un beneficio en el balance de fichajes
- Clasificar para la Champions League
- Reducir el número de jugadores de 34 a 25
El primer punto era establecer un estilo de juego. Para esto debíamos firmar a un entrenador contrastado y que encaje con la idiosincrasia del club. El elegido ha sido un portugués, que conoce el club y ya sería su tercera etapa. José Mourinho volvería al Chelsea, acaba contrato con la Roma en 2024 pero el dinero de la rescisión de su contrato no sería un problema para Boehly, además que ya se rumoreó hace algunos meses la posibilidad de un retorno a Londres. El luso llegaría a Stamford Bridge para implementar un estilo defensivo y sólido y rápido al contraataque, reciclando en su formación una 1-3-5-2, siendo esto una variante de su actual 1-3-1-4-2 en Italia.

SALIDAS
Desde un punto de vista realista, hemos valorado la probabilidad de que ciertos jugadores se marcharan traspasados, y en caso de que no fuera viable, han acabado recalando aquí, en el apartado de cedidos. En la portería, la primera baja sería Gabriel Slonina. El guardameta de Illinois se marcharía en busca de minutos, ya que es nuestra gran apuesta de futuro. Los defensas Levi Colwill, Lewis Hall y Trevoh Chalobah partirían también en busca de oportunidades, a ser posible en un equipo de la Premier donde les garanticen esto. Cabe recalcar que el Chelsea siempre ha gozado de una gran cantera, entonces debemos cuidar a nuestros canteranos que en un futuro serán una parte crucial del primer equipo.
Chukwuemeka, David Datro Fofana y Madueke dejarían temporalmente el club. En la actual plantilla no tienen hueco y para que su proyección no se estanque, irían a equipos donde competir por un puesto importante. Para cerrar las cesiones, está Tiemoué Bakayoko. En la temporada 2017/18, el Chelsea desembolsó 40 millones por él y nunca ha rendido como se esperaba. Dado que acaba contrato la temporada que viene y Mourinho no contaría con él, la decisión es evidente. Sería cedido para ahorrar una parte de su salario y después sería un jugador libre.
La parte de los traspasos permanentes ha sido la más complicada, era necesario prescindir de varios jugadores importantes para generar el beneficio prometido anteriormente. La primera baja era de esperar, Édouard Mendy que ha bajado mucho el rendimiento, que dejaría unos 10 millones en las arcas del club. Los centrales Malang Sarr (7 millones) y Ethan Ampadu (5 millones) junto con Ruben Loftus Cheek (12 millones) y Mateo Kovačić (18 millones) abandonarían la disciplina de los Blue Lions en un intento de aligerar la plantilla.
La parte más polémica de las ventas son los jugadores de ataque: Hudson-Odoi (15 millones), Raheem Sterling (35 millones), Havertz (85 millones), Mason Mount (42 millones), Hakim Ziyech (30 millones), Aubameyang (6 millones) y Romelu Lukaku (75 millones). Entre estos 7 jugadores, generaríamos 340 millones, dándonos así un respiro a la hora de contratar jugadores y evitar las sanciones por el Fair Play Financiero.

FICHAJES
Para fichar y completar esa plantilla de 25 jugadores que permite la Premier League, hemos tenido que dar salida hasta 20 jugadores para poder hacer alguna incorporación de nivel. Comenzando por la portería, era urgente contratar un segundo portero de futuro, un poco más mayor que Slonina. De ahí el fichaje de Anatoli Trubin, guardameta ucraniano de 21 años del Shakhtar Donetsk; otro de los porteros más prometedores en el mundo, el coste sería de unos 20 millones de euros.
La defensa es férrea y sólida, con jugadores con muchos galones y apuestas de futuro. La única incorporación que ya está oficializada es Malo Gusto (30.000.000€), con lo cuál pasamos al centro del campo, donde sí hemos tenido varias bajas sensibles. La primera incorporación es una pesca en la agencia libre, pues Youri Tielemans, uno de los jugadores de Europa que da más pases progresivos por partido, finaliza su contrato con el Leicester City. Para acompañar al belga, traeríamos a un bombazo. Recién llegado desde Italia, flagrante campeón de la Serie A y de la Eurocopa: Nicolò Barella. El fichaje de Barella tendría un coste de unos 70 millones ya que aprovecharíamos la crisis del Inter que rebajaría el precio del jugador. La última incorporación no sería una novedad para la plantilla: ejerceríamos la opción de compra por Denis Zakaria.
Pasando a la parcela ofensiva, hemos acumulado dos grandes bajas en la posición de mediocentro ofensivo, tanto Havertz como Mount dejaron Londres. Para suplirlos, Christopher Nkunku fichará por el Chelsea por 60 millones. Esta transacción lleva siendo oficial un par de meses, por tanto la sorpresa es la siguiente. Mourinho, en la Roma, tiene una gran relación con un argentino con una cláusula de tan solo 12 millones para los equipos que no son italianos. Y sí, Paulo Dybala aterrizaría en Londres para vestir de azul.

Y de amigo de Mou a amigo de Mou, Armando Broja necesita un mentor. Un delantero barato que se asemeje a sus características físicas. Con una gran trayectoria. Un veteranísimo delantero sueco, Zlatan Ibrahimović que llegaría a coste 0 y se reencontraría con Mourinho. Y para acabar de darle rotación a la posición del 9, aprovecharíamos una crisis en Alemania. El Bayern tiene un problema con Sadio Mané, quieren que se marche lo antes posible, y ahí estaría Todd Boehly, dispuesto a poner 30 millones sobre la mesa por el atacante senegalés.
PLANTILLA FINAL (1-3-5-2)
- Porteros: Kepa Arrizabalaga, Anatoli Trubin, Marcus Bettinelli
- Centrales: Wesley Fofana, Kalidou Koulibaly, Benoît Badiashile, Thiago Silva, César Azpilicueta
- Carrileros/Extremos: Marc Cucurella (central de urgencia), Ben Chilwell, Reece James (central de urgencia), Malo Gusto, Mykhailo Mudryk, Christian Pulisic
- Mediocentros: Connor Gallagher, Youri Tielemans, Enzo Fernández, Nicolò Barella, Andrey Santos, Denis Zakaria (DFC urgencia)
- Mediocentros ofensivos: Christopher Nkunku, Paulo Dybala
- Delanteros: Armando Broja, Zlatan Ibrahimović, Sadio Mané

BALANCE ECONÓMICO
El Chelsea tendría unos beneficios de 85.000.000€ (y aún teniendo 100.000.000€ más de margen que da la Premier League a los clubes), tras recibir 340.000.000€, y gastar 255.000.000€, incluyendo los traspasos de Malo Gusto y Christopher Nkunku.
