El Getafe CF acaba de hacer oficial la vuelta del técnico valenciano al banquillo azulón, tras la destitución de Quique Sánchez Flores, y el posterior anuncio de que Rubén Reyes se haría cargo del equipo.
Tras algo más de dos días y medio de negociaciones, donde las mismas se truncaron por la duración del contrato, el técnico alicantino finalmente aceptó el reto de enderezar el rumbo de la temporada en 7 encuentros. En la noche de ayer, se le pudo ver en el Coliseum, pero no ha sido hasta esta mañana cuando se ha hecho oficial.
El técnico empieza así su segunda etapa en el banquillo azulón, después de haber dirigido al Getafe desde la temporada 16-17 hasta la 20-21, donde hizo las maletas y puso rumbo al Valencia.
En el banquillo azulón, dirigió 212 encuentros entre Segunda División, Primera, Copa del Rey y Europa League. Ganó en 83 ocasiones, empató en 60 y perdió 69 partidos, teniendo un 48,58% de victorias respecto a los partidos jugados.
Con el alicantino en el banquillo el Getafe volvió a primera, y consiguió su mejor clasificación histórica (5° puesto en la temporada 18-19), y volvió a disputar competición europea después de prácticamente una década. Rozó la clasificación a UEFA Champions League en varias ocasiones, y estuvo a punto de volver a disputar una final de Copa del Rey con el Getafe en la temporada 17-18.
Ahora, el técnico alicantino se encuentra una situación extrema, donde el Getafe está jugando con fuego, y a punto de quemarse si la cosa no cambia rápido. Con 31 puntos, el Getafe está al borde del abismo. Su próximo rival será el RCD Espanyol el próximo domingo, en el que será un duelo también de más de 3 puntos.
