Bayern y PSG se daban cita en el Alianz Arena para disputar el partido de vuelta correspondiente a los Octavos de final de la Uefa Champions League. El conjunto bávaro partía con ventaja tras lograr la victoria por 0-1 en la ida disputada en el Parque de los Príncipes.
Comenzaba un encuentro muy parejo, los dos equipos sin arriesgar por la importancia del partido pero con el objetivo claro de pasar de ronda. Los dos conjuntos se turnaban el dominio del partido pero sería el Bayern quien tendría la primera tras un gran disparo de Musiala.
Sin embargo, en el minuto 40, llegaría la más clara del encuentro tras conducción a ningún lado de Sommer y una buena presión parisina, propició que Hakimi Achraf le robara la pelota al portero suizo, cayéndole el balón a un Vitinha que remataría a puerta vacía.
Sin embargo, sucedió lo menos esperado, apareció De Ligt como un tren de mercancías para sacar el balón sobre la línea y permitir a su equipo conservar la ventaja sobre el marcador. Simplemente espectacular.
El Bayern no tardaría en adelantarse en el partido. Ya avisó el equipo alemán en el 52 con un gol de Choupo Moting anulado, pero sería el mismo delantero africano quien en el 62 pusiera el primero del partido y diera ventaja a los locales.
Un PSG lanzado tuvo la suya tras un gran remate de Ramos en un córner, pero Gnabry cerraría el partido en el 89 tras una letal contra que enviaba al PSG a casa en octavos una vez más.
