En Nervión esperaban desde hace tiempo la vuelta a su mejor nivel de Suso y por fin se puede decir que el gaditano está regresando a ese nivel dado en el Sánchez-Pizjuán, anteriormente.
El extremo sevillista en este último año y medio no ha pasado por su mejor momento futbolístico, ya que la temporada pasada tuvo la mala fortuna de tener dos lesiones en la misma campaña, en la que primera fue la muscular y cuando volvió de dicha lesión, cayó de nuevo con otra lesión y fue la de una luxación en el tobillo izquierdo. A causa de la última lesión mencionada se perdió todo lo que quedaba de temporada, donde pasó varios meses apartado del grupo y trabajando en solitario para la recuperación de su tobillo.
Tras eso, reapareció esta temporada el 3 de septiembre del año pasado ante el FC Barcelona, en aquel encuentro los sevillistas perdieron por 0-3 y el gaditano salió 35 minutos en los que se le vio mermado por los largos meses sin competir. De ahí hacia adelante fue todo en esa misma línea hasta que llegó Sampaoli al equipo que proponía una idea diferente a la que costó adaptarse en el corto de tiempo hasta llegar el Mundial.
Sin embargo, en el parón del Mundial se puso a tono a la vez que en ese tiempo iba también entiendo mucho más las propuestas de juego de el de Casilda. Tanto que es así, que ahora se ve un mejor Suso y primordial en el Sevilla, recordando a ese Suso de la temporada de 19-20 que enamoró a todos los sevillistas con sus grandes acciones de ver el pase preciso, de regate y por supuesto, también con su gran golpeo lejano. Esto es gracias al técnico argentino, que lo esta devolviendo a su mejor nivel encajándole en su puzle cada vez más y él se lo esta devolviendo con grandes actuaciones en los últimos encuentros, un gran ejemplo es el gol de ayer ante el Rayo, a pesar de que ser fue en propia del futbolista franjirrojo el chut fue suyo, tras dos años sin poder marcar con la camiseta nervionense.