
El Atlético de Madrid iniciar el próximo día 10 la pretemporada. Una pretemporada que cuenta con una novedad pocas veces vista antes: Simeone podrá contar con todos los jugadores del primer equipo para la concentración en Los Ángeles de San Rafael y para disputar los amistosos.
Será, por tanto, ver a canteranos. Apenas habrá chicos del B o juveniles que puedan pelear por entrar en los planes de Simeone. Ahora bien. Tanto el club como el Cholo, tienen aún temas que cerrar relativos a los canteranos, a los que han estado cedidos esta campaña o estas dos últimas campañas. Es el caso de: Manu Sánchez, Camello, Riquelme, Mario Soriano, Mollejo, Valera y Borja Garcés.
El “Caso Manu Sánchez” parece existir y estar mucho más presente de lo que se cree. El madrileño salió en la temporada 20-21 a Osasuna para seguir con su crecimiento, ya que tanto club como entrenador saben que tiene un futuro prometedor por delante.
En su primera temporada en Osasuna, disputó un total de 18 partidos (16 en Liga y 2 en Copa del Rey), no marcó, pero dio 4 asistencias. El juego del lateral izquierdo madrileño llamó la atención de Arrasate y del club rojillo, y pidieron otro año de cesión.
El Atleti renovó al jugador, y volvió a hacer las maletas para poner rumbo, de nuevo, al Sadar. En esta temporada 21-22, se ha consolidado como una de las piezas claves del sistema de Arrasate. Ha disputado 34 encuentros (33 en Liga y 1 en Copa del Rey), donde ha visto puerta en una ocasión y ha dado 3 asistencias.
Ahora, tras una temporada de gran nivel, Osasuna quiere volverse a hacer con sus servicios, pero de nuevo, en forma de cesión. Mientras, el Atleti quiere sacar tajada, e ingresar algo de dinero por uno de sus canteranos más prometedores.
Tanto Osasuna como Atlético de Madrid tendrán que decidir qué pasa con Manu Sánchez: el club rojillo tendrá que decidir si pelea por una cesión o hace un esfuerzo económico por el lateral, y el Atleti decidir si acepta la propuesta rojilla, o si Manu Sánchez podrá tener un merecido hueco en el primer equipo, en una posición donde precisamente no sobran efectivos.
Sergio Camello, por su parte, es otro de los canteranos más prometedores cuyo futuro está en el aire. El delantero, por ahora rojiblanco, viene de una temporada donde ha demostrado que tiene nivel de sobra. Tras una temporada 20-21 con el filial rojiblanco convulsa, donde fue de los pocos que se salvó, el Atleti decidió cederle para que siguiera creciendo, y para ver hasta dónde puede llegar.
Su destino fue el Mirandés, en la categoría de plata. Una prueba de nivel para un jugador joven, que aprobó y con nota. El canterano rojiblanco fue una de las noticias positivas del año. En Anduva el delantero ha hecho magia, y hasta ahora los mejores números de su corta pero ilusionante carrera.
Ha disputado 36 partidos esta campaña, donde ha marcado 15 goles y repartido 3 asistencias. En Anduva ha enamorado, pero también ha enamorado a media Primera División. Sus números han hecho que equipos como el Rayo Vallecano, Getafe o Celta, entre otros, se hayan interesado por un préstamo.

El Atleti aún no sabe qué pasará con su futuro, ya que primero estará a las órdenes de Simeone en pretemporada, y habrá que ver qué decide el técnico argentino. Pero él mismo afirmó que “tiene nivel para jugar en Primera División”, y al Atleti no es que le sobren delanteros centros precisamente.
Roro Riquelme es otro de los nombres propios cuyo futuro está en el aire. Junto con Camello, fue de los pocos que se salvó en la temporada de descenso del Atleti B a lo que hoy es 3º RFEF. Compartió destino con su compañero de equipo, y aterrizó también en Anduva.
Junto con Camello, han formado una de las duplas más importantes de Segunda División, y ha dejado enamorado a Anduva con su juego. El extremo derecho ha hecho unos números de escándalo en su primera temporada en el fútbol profesional, demostrando también que tiene mucho fútbol en sus botas.
Ha disputado 36 de los 42 partidos de Segunda, donde ha logrado ver puerta en 7 ocasiones, y ha repartido 12 asistencias. Unos números que, como ha pasado con su compañero, han llamado la atención de varios equipos en Primera División.

El Atleti tiene l a incógnita con ambos futbolistas, pero lo que sí se sabe, es que el club rojiblanco buscará ampliarles a ambos los dos años de contrato que les resta. Lo más seguro es que se les busque una cesión para que puedan seguir creciendo, y se buscará una cesión a un equipo de Primera, para ver si mantienen unos números similares, y de verdad están preparados para tener una oportunidad en el primer equipo.
Mario Soriano es otro de los canteranos a destacar también en esta última temporada. El de Alcalá de Henares ha estado cedido esta temporada en el Deportivo de la Coruña, donde ha sido uno de los pilares del equipo y uno de los nuevos ídolos de la afición gallega.
En una temporada donde el Deportivo buscaba volver al fútbol profesional rápido, el mediocentro ha sido uno de los más destacados del equipo. En 1º RFEF ha disputado 29 partidos, donde ha marcado 3 goles y ha dado 2 asistencias. Aunque puedan parecer números pobres, la realidad es que el madrileño ha sido uno de los puntos fuertes de los gallegos.
El Atleti tendrá que decidir también qué hacer con Mario, quién es una de las perlas de la cantera. En el equipo gallego les encantaría volver a contar con él, y si el Atleti no quiere lo contrario, él estaría dispuesto a volver a Riazor. Puede haber culebrón, o no, y como en casos anteriores, dependerá también de la pretemporada.
Víctor Mollejo es otro de los jugadores cuyo futuro debería ser resuelto más pronto que tarde. El manchego lleva viviendo de cesión en cesión desde que en la temporada 19/20 pusiera rumbo al Deportivo de la Coruña. Del Deportivo, se fue cedido al Getafe en la primera mitad de la 20/21, donde apenas tuvo protagonismo. Del Getafe marchó al Mallorca en la segunda mitad del curso. Y en la 21/22, el extremo ha estado cedido en el Tenerife, donde se ha marcado una temporada notable.
El jugador de Alcázar de San Juan ha sido una pieza clave en los esquemas de Ramis, en una temporada en la que el Tenerife se quedó a un suspiro de regresar a Primera División. Jugó un total de 43 partidos, 37 en fase regular y 4 en fase de ascenso, y 2 en Copa del Rey. Vio puerta un total de 4 veces, y dio 3 asistencias.
En estos años, Mollejo se ha convertido en un jugador polifuncional, además de haber madurado como jugador. Ahora bien, es difícil que en el Atleti tenga hueco, tanto él como el club lo saben. Por eso, desde el club se apunta a otra cesión, ya que el jugador tiene contrato hasta 2024, a un equipo como el Tenerife. El Zaragoza ha llamado a sus puertas, y habrá que ver si tanto a el jugador como a el club, les convence la oferta, y hace las maletas para jugar en la Romadera.
Germán Valera ha sido, quizá, el más discreto de todos los canteranos rojiblancos cedidos en esta temporada. El murciano es una de las perlas de la cantera rojiblanca, y este era su segundo año de cesión. En la 20/21 estuvo cedido en el Tenerife, donde cuajó una buena temporada.
El Atleti le volvió a buscar una cesión, esta vez al filial de la Real Sociedad, recién ascendido a Segunda. Ahora bien, quizá haya sido el más discreto de todos, a pesar de haber llegado a tener minutos con el primer equipo.
El murciano ha disputado 20 partidos en Segunda División, 810 minutos, el que menos ha jugado. Tan solo ha logrado ver puerta en una ocasión, y no ha repartido ninguna asistencia. Con el primer equipo, ha jugado 48 minutos, repartidos en 3 partidos.
El más silencioso de todos, al que seguramente sí o sí se le busque una salida, o dependiendo de las salidas que haya en el filia, se le pueda buscar sitio en el Atleti B. Como los demás, parece que iniciara la pretemporada a las órdenes de Simeone, aunque no se sabe con certeza hasta el día 10.
Por último, Borja Garcés es otro de los nombres propios de los canteranos rojiblancos. La temporada del melillense no ha sido para nada fácil, y ha sido más irregular que cualquier otra.
En la 20/21 estuvo cedido en el Fuenlabrada, donde cuajó una buena temporada. Esa buena temporada hizo que pudiera acabar la pretemporada con el Atleti, pero luego se volvió a marchar cedido. Su destino fue Leganés, donde no ha tenido ni mucho menos la temporada deseada.
Llegó tocado, y el equipo pepinero, a las órdenes de Garitano, no comenzó bien la Liga. El mal momento del equipo y los problemas físicos del delantero, hicieron mella en el jugador. Con Garitano aún en el banquillo, la polémica rodearía al jugador de Melilla. Se marchó a la boda de su hermano, supuestamente sin permiso ni del club ni del entrenador. En rueda de prensa, este último afirmó que con él, no volvería a jugar.
Con él no jugó más, pero unas jornadas después, Garitano fue destituido, y su lugar lo ocuparía Nafti, para intentar dar a la vuelta a una complicada situación del equipo madrileño. Pero en lo personal, con Nafti las cosas tampoco mejoraron para Garcés. En enero su entorno se planteó buscarle un nuevo destino, pero ni pepineros ni rojiblancos estuvieron por la labor de romper la cesión.
2022 ha sido un año para el olvido, ya que apenas ha aparecido, y ha vivido más en el anonimato que en el campo. Desde enero hasta mayo, Garcés no fue titular, y apenas disputó 88 minutos, repartidos en cinco encuentros. La temporada acabó de forma decente, siendo titular en las últimas jornadas, cuando el Leganés ya no se jugaba nada. Ha acabado el curso con 30 partidos disputados, 28 en Liga y 2 en Copa, tan solo 5 goles a favor y una sola asistencia.
El Atleti tiene muchas “patatas calientes” que enfriar en este mercado en cuanto a cantera se refiere. El club madrileño podría buscar la venta de algún canterano para hacer frente a los problemas económicos que de momento le impiden fichar.
Algunos han brillado más que otros, y desde el club quieren sacar tajada de eso. Veremos qué decisiones toma el club, y si algún canterano comienza a formar parte de la disciplina rojiblanca, algo que no pasa desde que Saúl debutase en el Atlético de Madrid, ya que todos han ido saliendo poco a poco.
