El pasado sábado el Sevilla obtuvo su tercer empate consecutivo en la competición liguera: Valencia (1-1), Celta de Vigo (2-2) y Osasuna (0-0). La vuelta de jugadores importantes como En-Nesyri y la llegada de Martial al conjunto sevillano no fueron suficiente para levantar el partido a su favor y llevarse los tres puntos.
Empezando desde la parte de atrás, el regreso de Bono ha sido una de las mayores alegrías que han tenido los aficionados del Sevilla, que hizo gala de muy buenas paradas y sigue al nivel que se encontraba antes de partir con su selección para jugar la Copa de África.
Sin embargo, el regreso de En-Nesyri y la llegada de Anthony Martial no fue como todos se esperaban.
A En-Nesyri se le vio poco participativo en jugadas de ataque y no se le notaba en el campo como otras veces en el terreno de juego, no hacía desmarques rápidos, no tiraba a puerta; en resumen, no fue la noche del delantero marroquí, que parece que le costó la vuelta al equipo de Julen Lopetegui.
Por otra parte, tenemos el debut de Anthony Martial. Al francés tampoco pudimos verle lucirse en el terreno de juego como tantas veces se ha visto en su anterior equipo, el Manchester United. No le salían del todo bien las cosas, también condicionado al juego del equipo, sobretodo en la primera mitad del partido dónde el Sevilla no era capaz de llevar a cabo buenas jugadas ofensivas.
Lo que está claro, es que ambos delanteros no tuvieron su noche en El Sadar, y por parte de todo el sevillismo se espera un cambio favorable de estos dos y que empiecen a llegar los goles.