Dejar los deberes para el final no suele salir bien, pero hoy la balanza cayó a favor del Betis de Manuel Pellegrini. Sí, contra todo pronóstico, después de 90 insufribles minutos dignos de un empate más que merecido. “Hasta el rabo todo es toro”, y los verdiblancos no lo han podido describir mejor.
Esta versión del conjunto sevillano no calza con lo que llevamos viendo a lo largo de la temporada, y es que no deleitó a su afición ni con puntería ni buen fútbol, tampoco escatimó con mucho un buen despliegue físico ni con una defensa tenaz. No obstante, en una defensa formada por Edgar y Bartra no se puede tener muchas esperanzas, aunque hoy, cumplieron. Portería a cero y a seguir adelante.
El Alavés avisó, pues dos fueron los palos que dieron los chicos de Javi Calleja. La posesión no fue una condición de victoria, pero en más de una ocasión cortó la respiración de los béticos. Pero sin más, confiamos en el concepto de partido táctico y correoso, ninguno de los dos equipos quiso cogerse los dedos.
Los cambios surgieron efecto, aire nuevo a un equipo que parecía desquiciado y sin ideas. Joaquín y Borja Iglesias mejoraron a Willian José y Rodri, que llegó a la segunda parte desbordado. Canales no estuvo nada acertado, él mismo lo sabía y mostró su descontento en el banquillo. Fekir en cambio, volvió a ponerse el mono de trabajo e hizo funcionar a su equipo.
En el minuto 88’ y con una asistencia de ‘10’ por parte de Joaquín, el Betis se llevaría los tres puntos, con estreno goleador del “Panda” en competición liguera. Esta inyección de confianza será vital para el partido de Europa League, frente al Bayer Leverkusen en casa, oportunidad irrepetible para sellar la clasificación virtual.
