Hace más de 4 años desde que “Factor” Lainez aterrizó en las filas verdiblancas y desde entonces los aficionados béticos han esperado bastante para poder ver una de las mejores versiones del extremo mexicano. Desde que fue campeón con las Águilas del América en México, Lainez no ha demostrado nuevamente todo ese desequilibrio y descaro que lo caracteriza, un jugador pequeño, regateador y con una aceleración espectacular. 
Una cifra cercana a los 14 millones de euros fue lo que el Real Betis pagó para hacerse con uno de los jugadores más talentosos del fútbol mexicano. Desde entonces, han sido 59 partidos disputados con la casaca verdiblanca, en los cuales Lainez ha aportado 2 goles y 6 asistencias, unas cifras bastante discretas tomando en cuenta lo mucho que se pagó por él y el cartel con el que emigró al viejo continente.
A pesar de todos estos altibajos en la carrera de Lainez con el Betis, esta nueva temporada tiene un “aroma especial” para el oriundo de Tabasco, ya que el mexicano tuvo un gran verano con la selección mexicana, dónde mostró un gran papel haciendo goles de una gran manufactura, además de conseguir un gran logro, como obtener la medalla de bronce en los Juegos Olímpicos de Tokyo 2020, siendo esto una muestra del gran nivel que tenía desde fines de la temporada 20-21 con el club bético.
Por lo cual creemos que Diego Lainez está en la antesala de uno de las temporadas más fructíferas en su carrera, pues el mexicano apunta a ser más regular en los 11’s de Pellegrini, de manera que pueda demostrar su talento y explotar las grandes características que tiene. Esto claro está, para ayudar a un club bético que busca lograr la hazaña tanto en La Liga como en la Europa League.
